(VON) – Antes que entremos en la música, ¿puede hablarnos un poco acerca de su experiencia en el pensamiento Oriental? Usted a estudiado con algunos de los mejores profesores de su tiempo, Ram Das, Maharaji-
(KD) – Nosotros no estudiamos, nosotros pasamos un tiempo junto – y comimos. Comimos mucho poi y papas (Ríe). Estar en la India, conociendo a personas que realmente están involucradas con el mundo, con sus familias y negocios, y que todavía viven todo el tiempo en el espíritu. Eso fue asombroso. Estaban conectados, sin importar lo que estuvieran haciendo, o donde se encontraran. 

¿Entre ellos, quienes fueron su mayor inspiración?
Todos los grandes santos. Ellos están en eso todo el tiempo – ellos están conectados. Por lo tanto, cada vez que uno escucha o lee acerca de ellos, es inspirador. Es inspirador saber que alguien lo hizo. Yo tuve la gran bendición de conocer a mucha personas maravillosas, realmente maravillosas. Y para mi fue el estar con Maharaji, compartiendo tiempo con él día a día, eso cambió mi vida. Es por eso que hoy en día canto y toco música.

Anoche usted hablo acerca de realizar cánticos como una manera de lidiar con la ansiedad y el estrés que afectan nuestras vidas. ¿Es esto lo que las personas debería buscar cuando asisten a uno de sus conciertos o a cualquier kirtan?Entre menores sean las expectativas mejor. (Ríe) Las personas vienen a experimentarlo. Puede ser que hayan escuchado que es agradable y divertido, pero hay tantas cosas que suceden cuando usted empieza a cantar. La práctica por si misma es muy simple. Usted empieza a repetir esas frases, llamadas y respuestas, una y otra vez. Tan pronto como se de cuenta que esta pensando en algo, deje ir ese pensamiento y regrese a los cánticos. Esa es toda la práctica. No se requiere nada. Usted no debe de creer, unirse o ser seguidor de nada. Solo se trata de su experiencia individual en esos momentos. 

¿De dejar ir?
Claro, una de las cosas que usted hace es tratar de dejarlo ir. Pero usted no esta ni siquiera tratando de dejarlo ir. Usted sólo esta tratando de cantar y así es como empieza a dejarlo ir. Con el paso de tiempo cuando esta cantando, especialmente con un grupo grande de personas, usted comienza a cultivar una conciencia de su propia mente, reconociendo cuando un pensamiento aparece en su cabeza. Estoy pensando – regreso – estoy pensando – regreso. Usted comienza a irse menos y a estar más en casa. Comienza a tener su propia experiencia personal de cómo se siente estar con usted mismo. Eso es lo que puede suceder durante el curso de un kirtan. 

En sus canciones usted canta los nombres en sánscrito de distintos dioses o deidades – nombres que realmente no significan nada para una gran parte de su audiencia. ¿Es importante cuáles palabras o nombres usted esta cantando? ¿O es la resonancia de la música, y el sentirse como parte de un grupo mayor lo que crea este efecto?
Ese es un punto muy interesante. No es que los nombres o las palabras no sean importantes. Es más o menos como si usted fuera a un concierto de rock y que la música sea excelente y usted se siente muy bien y canta durante tres horas, pero después no mucho ha cambiado. En este caso la música es como un jarabe y la medicina es el nombre – se encuentra escondido en el jarabe. La música nos permite entrar más profundamente a la repetición de los nombres. Y los nombres nos llevan a nuestro propio ser verdadero, a esa sensación de estar en casa.   

¿Qué diría usted que representan los nombres?  Sin entrar muy profundamente en la metafísica del lenguaje sánscrito, de la cual no se mucho, ellos representan nuestra verdadera naturaleza. Nuestro verdadero ser. Quienes somos. Son algo que va más allá del lenguaje conceptual.

Ahora, también existe un elemento de rock en su música, un ritmo medido y una sensación de progresión dentro de sus canciones. Con respecto a esto, ¿puede hablarnos un poco acerca de sus primeras influencias?
Crecí con el rock 'n roll.  A inicios de los cincuenta existían ciertos nombres que usted nunca habrá escuchado. Después aparecieron Ray Charles y Bob Dylan. La música folk y el blues fueron realmente importantes para mi – realmente me encantaba el country blues. Y luego vinieron los Beatles, los Stones…después Clash, Steely Dan y Van Morrison.