Según un análisis financiero realizado por la Universidad de Costa Rica en el 2009, con un costo aproximado de USD $599.1 millones, la pesca deportiva tiene un impacto significativo en el ingreso total de Costa Rica (Producto Interno Bruto – PIB). Adicionalmente, la pesca deportiva genero 63,000 puestos de empleo directos e indirectos en el país. Sin embargo, todavía no se ha realizado un estudio o reporte oficial sobre el impacto económico de la pesca deportiva en los océanos.
Considerando especialmente que el turismo costarricense se basa en el ecoturismo, ¿cuál podría ser el impacto a largo plazo de la pesca deportiva sobre el medio ambiente? ¿Y por qué no existe un interés en descubrirlo?
De acuerdo a Sam White, uno de los coordinadores del torneo Presidential Challenge (Reto Presidencial), un torneo de pesca deportiva dedicado a la conservación y protección del pez de pico y otros peces de pesca deportiva, en el 2008 (el mismo año en que se baso el análisis financiero), 33 participantes pescaron y liberaron 111 peces. Ese mismo año el país recibió 283,790 turistas que venían únicamente con el propósito de pescar, representando el 22% del número total de turistas que visitaron Costa Rica. Con tantos pescadores viniendo al país, aproximadamente 954,566 peces fueron pescados y liberados en el 2008.
El Billfish Foundation (Fundación de Pez de Pico) es una organización no gubernamental estadounidense “dedicada a la conservación de la naturaleza y del medio ambiente y, particularmente, al pez de pico y a la diversidad marina alrededor del mundo”, se encuentra realizando estudios de marcado. Además, se realizó un estudio en el Golfo Dulce que fue conducido por PIER (un instituto de investigación sin fines de lucro). Se atraparon ocho peces gallo, se marcaron, se liberaron y, durante el transcurso de dos años, se observo que todos los individuos sobrevivieron. Sin embargo, no existe un registro importante de la tasa de mortalidad o de supervivencia de los peces que son atrapados y liberados en Costa Rica.
Sobre el efecto ambiental, Andrew Saxton, quien practica pesca deportiva en Playa Pelada mencionó, “Un capitán de pesca probablemente les diría que casi no tiene ningún efecto Y, en su mayoría, tienen razón”. Mientras explicaba que tan pequeño es el número de peces que pueden ser atrapados en la pesca deportiva, Saxton también agrego, “Digamos que usted tiene 10 barcos en una bahía como Garza, y que todos salen un día específico y tienen el mejor día de sus vidas. Entonces tal vez habrían pescado100 peces si cada uno de ellos pesco 10.”
Andy Bystrom, consultor ambiental del Programa de Restauración de Tortugas Marinas (PRETOMA) explicó que la pesca deportiva tiene un bajo impacto sobre el medio ambiente.“Las técnicas que utilizan son muy selectivas sin la posibilidad de realizar capturas”, continuó. Habiendo dicho eso, no causa mucha distracción sobre el sistema ecológico del fondo marino, “Las personas que practican la pesca deportiva generalmente han estado trabajando con las autoridades nacionales para tratar de idear estrategias que beneficien las industrias de la pesca deportiva”.
Además, Adrián Arias, Coordinador del Departamento de Ciencias de MarViva, una organización no gubernamental costarricense, dijo “Si la pesca deportiva se hace de la forma correcta, el impacto ecológico se reduce en gran medida e incluso puede ser una actividad sostenible.”
Sam Bryson también agregó que Costa Rica ha visto una gran disminución en el número de peces, causado mayormente por las flotas nacionales de barcos camaroneros y por los barcos nacionales e internacionales que pescan con palangre. En su opinión los océanos en Costa Rica, donde la captura y la liberación son una práctica común, pueden soportar la demanda que representan los pescadores deportivos.
La captura y la liberación es una técnica de conservación utilizada en la pesca deportiva. Luego de la captura, el pez debe ser liberado del anzuelo y devuelto al océano antes que experimente cualquier tipo de trauma físico severo. La idea es preservar la población de peces con una posibilidad mínima de causarles daño. |
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Adrián Arias explicó, “La pesca deportiva en Costa Rica tiene una tendencia fuerte hacia la captura y liberación; muchos de los peces de pesca como el pez aguja, el pez vela y el pez gallo son considerados más valiosos vivos que muertos por lo que son liberados por muchos pescadores…matar este pez es algo inaceptable para muchos de ellos”.
Sin embargo, todavía existe la posibilidad de que el pez sufra un barotrauma. Además, la captura y liberación se realiza bajo la suposición de que el pez no siente dolor.
Póngase en los zapatos del pez
Al igual que con los buzos, los peces que son expuestos a los cambio de presión súbitos como consecuencia de la pesca profunda no logran ajustar la fisiología de su cuerpo al nuevo ambiente. Según un estudio realizado por investigadores del Departamento de Industrias Primarias de Nueva Gales del Sur, el barotrauma “puede causar una sobre inflación de la vejiga natatoria, la cual puede comprimir o lastimar otros órganos. Además, las burbujas gaseosas pueden bloquear o reventar los vasos sanguíneos, deteniendo el flujo sanguíneo hacia los tejidos u órganos vitales Sin la atención adecuada, el barotrauma puede causar a la muerte”.
Andrew Saxton explico que, para evitar el impacto del barotrauma, el pez necesita ser reanimado para iniciar el flujo de oxígeno a través del cuerpo. Adrián Arias comento, “El barotrauma ocurre en los peces adaptados a vivir en el fondo del mar (como los meros). La pesca profunda no es muy popular en Costa Rica ya que nosotros tenemos peces importantes para la pesca deportiva, como el pez aguja, pez vela, el sábalo y el dorado, que viven las capas superiores de la columna de agua.”
¿Sienten dolor los peces? Si y no. Mientras que un estudio realizado por el Dr. Lynne Sneddon de la Universidad de Edimburgo, descubrió la existencia de receptores de dolor en los peces, el Dr. James D. Rose de la Universidad de Wyoming asegura que el cerebro del pez no se encuentra lo suficientemente desarrollado para tener la experiencia fisiológica del dolor.
Debido a que esta pregunta continua sin tener respuesta, Sara Arrand, residente de Playa Sámara que se ha involucrado activamente en asuntos ambientales como parte de su vida personal, hace una pregunta: “¿Se encuentra mejor el pez después de que ha sido capturado durante la pesca deportiva de lo que estaba antes, cuando se encontraba nadando libre en el océano; o está mucho peor?”
Aquellos que se oponen a la pesca argumentan que los peces deben ser dejados en paz en el océano. Felipe López, biólogo costarricense, pregunto “¿Cómo puede usted pensar que el pez no esta lastimado luego de luchar por su vida durante horas y horas?”
Arrand también comento “Rechazo la excusa económica como la causante de todas las cosas malas que ocurren en el mundo. Solamente porque produce dinero no significa que sea correcto”.
Entonces, ¿es la pesca deportiva un juego justo?
Según la definición de deporte, el juego justo es uno de sus requerimientos. El juego justo requiere dar a todos los participantes las mismas oportunidades. La frase también posee otras sub-definiciones, tales como imparcialidad y justicia.
En el caso de la pesca deportiva, no se reconoce que el pez va a estar luchando por su vida durante horas. El aspecto de justicia de esto sigue siendo debatible.
Mientras Saxton prefiere llamar a la pesca deportiva un "pasatiempo activo", el Capitán Ryan Bombard dice que la pesca deportiva es un deporte. Ya sea un deporte o un pasatiempo, el impacto ambiental de la lucha entre el ser humano y los peces, causándole a estos muchas horas de agonía, todavía es una interrogante que debe ser evaluada.
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