En menos de una semana de trabajo el salón comunal de Sámara paso de ser un sitio deteriorado y lleno de residuos a un espacio abierto y fresco en donde la comunidad puede realizar actividades de manera conjunta. El proyecto tuvo lugar del 8 al 12 de marzo y contó con el apoyo de la empresa de origen norteamericano, Triskallian Tours, y de la Asociación CREAR. Como hemos mencionado en varias ediciones previas del VON, la Asociación CREAR brinda educación adicional a los escolares de la zona, tanto en Sámara como en Torito, y además se esfuerza por mejorar los recursos educativos de toda la comunidad. Con la ayuda de la Escuela de Idiomas Intercultura, el C&C Surf School y del Hotel Tico Adventure Lodge, las dos organizaciones generaron los fondos y materiales necesarios para lograr esta urgente labor.

La empresa Triskallian Tours fue fundada en el año 2005 bajo el concepto de que viajar enseña a los adultos jóvenes valiosas lecciones de vida que no pueden ser aprendidas dentro de un aula. En palabras de su Director, Peter Friedman, “nuestros programas están diseñados alrededor de tres principios básicos – la inmersión cultural, el voluntariado y las actividades al aire libre. Nuestra meta primordial es que, tanto nuestros viajeros como las comunidades que visitan, se beneficien de nuestros programas en una forma palpable y duradera”. En este caso, los voluntarios fueron 12 estudiantes de la prestigiosa Peddie School de Highstown, Nueva Jersey, quienes trabajaron sin cesar durante largas horas, bajo el sofocante calor, con el fin de terminar el proyecto a tiempo.

Previo a su renovación, algunas partes del salón comunal se encontraban, literalmente, amontonadas hasta el techo de escritorios y sillas quebradas, así como de basura y materiales de construcción – dejando algunos de los aposentos del salón completamente inservibles. La pintura se encontraba desteñida y despegada, las barandas y barras metálicas se encontraban oxidadas y, en general, el centro necesitaba una buena limpieza. Los voluntarios organizaron la basura, desechando lo inutilizable y trabajaron arduamente para restaurar lo que podía ser rescatado. Juntos lavaron con mangueras, sacudieron el polvo, lijaron y pintaron el salón comunal, felices al ver los resultados positivos que tuvieron en la comunidad de Sámara. Además, re-barnizaron la madera y aplicaron pintura para metales a todas las barandas y barras del edificio.

Como si fuera poco, los voluntarios de Triskallian trajeron consigo más de 100 palos de lacrosse (donados por el Tri-State Lacrosse, con base en Nueva Jersey) así como 20 monitores para computadora de pantalla plana, con mouse y cables de energía incorporados, los cuales fueron donados por el padre de uno de los estudiantes y que fueron entregados a CREAR para que ellos se encarguen de su distribución entre las escuelas de la zona.

Actualmente, Triskallian Tours se encuentra trabajando con CREAR y otras organizaciones de la zona con el fin de identificar distintos proyectos de ayuda comunitaria en los cuales sus viajeros puedan trabajar, ya sea durante la sesión de verano que se aproxima o posteriormente. Como menciona Peter Friedman, “estamos convencidos de que existe una gran necesidad de ayuda externa, como un fuerte deseo de hacer una diferencia por parte de nuestros viajeros”.