El 8 de abril cientos de peces aparecieron muertos en la boca del Río Nosara y el presunto culpable es la marea roja. Mientras que esto puede provocar temor ante la idea de que el fenómeno está aquí con toda su fuerza, las autoridades de monitoreo de marea roja de INCOPESCA aseguran que no hay nada de que preocuparse.
La autoridad monitorea los niveles del fitoplancton que provoca la marea roja. Durante el mes de febrero, se reportaron niveles elevados en el Golfo de Nicoya. Desde ese momento, pescadores de Sámara y Nosara han notado pequeñas apariciones de marea roja en el océano Pacífico.
Sin embargo, un informe de INCOPESCA sobre marea roja señala que aún cuando la marea roja era más visible en el Golfo de Nicoya, la misma no alcanzó niveles tóxicos.
Según INCOPESCA, lo importante es la vigilancia. Si el mar se ve turbio y de color marrón, podría ser marea rojo o barro que ha sido expulsado hacia la superficie. El factor distintivo es el olor. Si el agua está turbia y huele mal, evite nadar en ella ya que el contacto le podría ocasionar irritaciones de la piel y mucosas, así como afecciones respiratorias. |