Los huesos de la rana de vidrio son visibles a través de su piel translúcida.

Son una impresionante visión de la complejidad del mundo animal. La rana de vidrio o de cristal, fue fotografiada en el bosque nuboso de Monteverde por el fotógrafo Nic Reusens.

Nic pasó 20 días en el exuberante bosque tropical y quedó fascinado por los pequeños anfibios y sus cuerpos translúcidos.

Utilizando un panel de vidrio, fotografió una rana de cristal salvaje con un flash doble difundido para capturar el efecto natural del cuerpo de la pequeña criaturas antes de devolverla al bosque.

Las ranas viajan a los ríos para poner sus huevos, pero generalmente se encuentran en los bosques nubosos.

Los resultados de las fotos fueron estas fascinantes imágenes de la rana donde se puede ver sus órganos interiores e incluso sus pequeños huesos.

Nic, de 37 años, mitad español y mitad sueco y quien vive en Madrid, dijo que su trabajo como carabinero le permite seguir su pasión por la fotografía de naturaleza.

Reuses dijo que “mientras que la coloración de fondo general de la mayoría de las ranas de vidrio es principalmente verde, la piel abdominal de algunos miembros de esta familia es translúcida”.

"Las vísceras internas, incluyendo el corazón, el hígado y el tracto gastrointestinal son visibles a través de esta piel translúcida, de ahí el nombre."

Una rana de vidrio, fotografiada en el bosque nuboso de Monteverde en Costa Rica, por el fotógrafo Nic Reusens.

"Las ranas de cristal son difíciles de encontrar y recoger, debido no sólo a su pequeño tamaño y color, pero también debido a las zonas extremas en las que a veces habitan. A menudo se encuentran a lo largo de arroyos que son casi imposibles de caminar, ni hablar de recoger una muestra”.

“Con nuevas áreas que están siendo constantemente estudiadas en la América tropical, seguro que más especies serán descubiertas y descritas ".

La rana de vidrio es relativamente común en el bosque nuboso de Monteverde.

"Las ranas varían en tamaño de 20 a 30 milímetros, pero algunas especies, como la centrolene geckoideum del el Pacífico Andino de Colombia y Ecuador, alcanzan tamaños más grandes".

Nic dijo que utilizó una Canon 5 D Mark III para obtener las imágenes con un objetivo de 100 mm L macro.
Agrego que "tuve que ponerla sobre una superficie de vidrio limpio y con mi flash doble difundido a alta velocidad para obtener el fondo oscuro con el fin de ilustrar el efecto de ver a través. Por suerte tuve la ayuda de un local para sujetar el vidrio por mí mientras me concentraba".

Estas ranas se descubrieron por primera vez en 1872